miércoles, 2 de mayo de 2012

Que No Me Representan!

Los sindicatos de este país son otra de las castas que hemos creado en nuestra mal llamada democracia. Parecen seres dogmáticos, intocables y místicos. En ellos reside la verdad y la fuerza. Sus seguidores gritan sus consignas y los defienden a palos si hace falta. Como cualquier otra secta.

Y como cualquier otra secta, manejan grandes cantidades de dinero, que sobretodo sirven para la buena vida de sus lideres y para mantener una serie de chamanes, sacerdotes o liberados (cualquier denominación sectaria que les guste). Estos se pegan la gran vida a costa de estos grandes presupuestos. Unos en forma de comilonas, otros en forma de relojes, la mayoría en forma de horas de trabajo no realizadas y sin necesidad de justificarlas, con el agravante de no poder ser despedidos, hagan lo que hagan o pase lo que pase en su empresa.

Y claro que se manifiestan, nos ha jodido. Porque ven que sus privilegios, que su vida a costa de los demás se ve un poco alterada. Porque en tiempos de crisis, donde no hay dinero para pagarlo todo, sus privilegios deben permanecer inmutables.

No me representan a mi, ni representaron a ningún trabajador en todos los años de democracia. Si no donde estaban escondidos mientras se destruían más de 3 millones de puestos de trabajo? Ah no! que los destruían los mios... los que me subían el presupuesto todos los años en cantidades indecentes.

No me gusta un parte importante de la reforma del PP, la que tiene que ver con subir los impuestos principalmente, la amnistía fiscal y algunos flecos del resto, pero lo que tengo claro es que no me puedo manifestar con la gente que me saca el dinero, que son una parte importante del problema, y que nunca serán la solución.

Que se financien solos, que sean organizaciones privadas y que una ley de huelga deje de una vez claro que vivimos en democracia, es decir, que la gente es libre de hacer huelga o no, de abrir su negocio o no y que todo el peso de la ley y las consecuencias de sus actos, deben ir contra los individuos que van contra la libertad individual de las personas, considerando responsables civiles subsidiarios a las organizaciones a las que representan.

10 comentarios:

Trecce dijo...

Y encima, si tienes algún problema en el trabajo, la mitad de las veces te quedan con el culo al aire.

Lobo dijo...

La democracia es una falacia. Es falsa. no vivimos en una democracia

Sostrato de Cnido dijo...

Por eso digo que no representan a los trabajadores. Son más bien otros parásitos más de un sistema creado para que vivan bien los parásitos.

Un abrazo Trecce

Sostrato de Cnido dijo...

Estoy de acuerdo con que no es una democracia. Y este es uno de los aspectos principales. Cuando se retira dinero de la gente, contra su voluntad, para mantener organizaciones con intereses propios y agendas privadas, entonces esa extorsión coarta la libertad individual y por lo tanto va contra la democracia.

Un abrazo Lobo

Lobo dijo...

Desmontar este sistema es como intentar desmontar un ordenador con un alfiler. La unica opción es dejar de ir a trabajar en masa y dejar de pagar facturas e impuestos en masa. Me pregunto que coño pasaría si todos hacemos algo así. Sería una revolución de verdad

ISIS dijo...

Metemo que es dar palos al aire, en mi trabajo, cuando era representante sindical, por ser la mosca cojonera, se me hizo la vida imposible, y los demás representantes, florecieron, se me cerraron puertas de la empresa y por supuesto del sindicato, pase a formar parte de los no-gratos. Sin embargo en estos momentos, hay que cambiar la forma de actuar de los sindicatos, pero el desmantelarlos y las criticas, creo que deben dejarse a un lado, de momento, si no nos unimos todos, conseguiran lo que quieren dividirnos. No hay que dividir, ahora hay que sumar y cuanto más mejor.

Un abrazo.

Sostrato de Cnido dijo...

El sistema no se desmonta porque los que tenemos el poder, la gente, somos ovejas. No hace falta ni siquiera nada tan revolucionario como eso, pero requiere esfuerzo y estamos educados para ser gente adormecida.

Un abrazo Lobo

Sostrato de Cnido dijo...

Desde luego quedarse fuera de la corriente, ya sea a favor de unos o de otros, crea disidentes excluidos de toda posibilidad de prosperidad.

No creo en la teoría de más vale lo malo conocido. Unirnos todos? con quien? con los sindicatos que llevan años expoliando al sistema, haciendo el trabajo de las multinacionales o de los partidos? creando paro y robando dinero?

No gracias. Nos iría mejor sin ellos, pase lo que pase. La suma de errores no mejora nada, con lo cual a veces hay que dividir.

Un abrazo Isis

Jesus dijo...

Bueno, está claro que hay muchas cosas que criticarles. Pero también hay delegados sindicales o liberados que verdaderamente luchan por los derechos de los trabajadores.

Antes los sindicatos estaban prohibidos. Con la lucha del movimiento obrero se legalizaron y se mejoraron las condiciones de trabajo.

Sí representan, pues hay elecciones sindicales. Otra cosa es que no nos gusten o no estemos de acuerdo en muchas cosas que hacen.

Pero eliminándoles no se consigue nada. Lo que hay que hacer es reformarles para que sean más éticos y nos representen mejor.

Un saludo.

Sostrato de Cnido dijo...

Perdón por la tardanza, pero me meto en muchos más líos de los que puedo controlar y a veces mi tiempo no da para más.

El valor histórico de los sindicatos para mi esta fuera de toda duda, pero eso no significa que ahora hagan falta, o que lo que haga falta sea esto que tenemos. Ni siquiera que estos sindicatos se parezcan en nada a aquellos.

Los sindicatos actuales, como organizaciones, representan dos cosas. El brazo en la calle de algunas facciones o partidos políticos (a lo que apoyan cuando tienen poder o intentan restauran cuando lo pierden) y por otro lado, instituciones, que al igual que partidos políticos, fundaciones y muchas ONGs, simplemente sirven para desviar cientos de millones de euros hacia donde los quieren algunos (inclusive sus bolsillos)

La solución, como pasa con todo lo demás, es hacer leyes para la refundación de todas estas organizaciones. Entre estas leyes, se debe encontrar como su financiación debe ser autónoma y no dependiente de ninguna ayuda pública, de ninguna manera y bajo ningún concepto (incluida la subvención o exención fiscal). Por supuesto habrá que incluir aquí a religiones, equipos de fútbol y todo lo demás que nos chupa la sangre.

Un abrazo Jesús. Al final tendremos que fundar un blog juntos para pegarnos allí, como amigos, eso sí