jueves, 10 de marzo de 2011

Improvisación

La serie de medidas que el gobierno está tomando para solventar la crisis, o paliar sus efectos, son en unos casos acertadas, en otros casos van en la dirección correcta pero son francamente insuficientes, algunas de ellas se enuncian bien pero después no se aplican o se aplican mal y otras son totalmente disparatadas. La única característica que une a todas ellas es la improvisación.

Esta improvisación proviene, o bien de no saber lo que hay que hacer, lo cual sería desastroso, o de saber que hay que hacer y no atreverse a hacerlo, lo cual seria deleznable.

La improvisación mata la economía de cualquier país en un mundo en el que la gente que vive de la especulación se nutre de las dudas y de los gobiernos débiles (con el nuestro van a reventar). La última del gobierno pasa por reformar ahora un sistema bancario que lleva tocado de muerte tres años. Y lo hace de nuevo con medias tintas y dejando cadáveres en los armarios, para que se descompongan y pudran el resto.

Hace muchos años que las cajas tenían que haber desaparecido del panorama político, y esta ley permite que se vayan capitalizando de forma privada, preo no en la cantidad suficiente. La propiedad de la mitad de nuestro sistema bancario esta en manos del estado y es gestionada por el político de turno que no sabe sumar dos números primos.

De aquí solo se sale con un plan ambicioso, planteado a 10 años como mínimo, pactado entre las grandes fuerzas políticas y que pasa inevitablemente por la privatización y liberalización de todos los sectores económicos, sujetos a regulación y vigilancia, claro, pero sin las manos políticas urgando en ellos. Las Cajas deben ser lo primero, pero hay que seguir con aena, renfe, las partes que el estado conserva en Telefónica o Red Eléctrica. Hospitales y Colegios.

Se que estos dos últimos puntos serán muy conflictivos, pero no hablo de privatizar la educación o la sanidad. Hablo de que el estado no necesita poseer hospitales para tener un sistema de asistencia sanitaria, y que acudir a hospitales privados y pagar la factura de lo que allí se haga es infinitamente más barato. Con respecto a la educación estamos en el mismo sitio. Los cheques escolares para pagar la educación obligatoria y las becas para pagar el resto son suficientes para garantizar la cobertura económica del sistema, repito de forma más barata y obteniendo el beneficio de la privatización para salir del agujero en el que nos hemos metido.

Ahora bien, esto no es llegar al extremo contrario y abandonarlo todo. La educación, los temarios, las horas, las actividades y el sistema tiene que seguir dirigido desde el estado, con un control absoluto y con inspectores que hagan cumplir la legalidad como se la hacen cumplir a una gasolinera o a un  parking. En los hospitales o seguros medicos pasaría igual.

Estos temas dan para un desarrollo largo cada uno y son suficientemente complejos para que la discusión pueda ser infinita, pero hay algo que es innegable. La gestión pública por parte de los políticos y del estado es siempre ineficiente y muy costosa, bloquea la iniciativa privada y cambia empresas rentables baratas y que funcionan y pagan sus impuestos por empresas caras, con listas de espera y presupuestos multiplicados por cinco que nos cuestan a nosotros más impuestos.

La iniciativa económica tiene que ser privada y privatizada y el control público y férreo. Reducción de gastos y maximización de beneficios para salir de la crisis, y evitar crisis futuras, y no hay otro camino, y al que no le guste... que se joda

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